23.7.05

Campo magnético


Pintura: Gustav Klimt .



"Y las plantas
Cerca de la playa
Bajo en el valle
Recuerdas tú
Un sauce
Cerca de mí
Cerca de mí
Y cerca de ti..."

Luis Hernández.



Otra vez lo haré . Entraré a la dimensión imaginada. Ahora me despabilo, abro los ojos de tal
manera que absorban la imagen, y me lleven poco a poco a este bosque. Aquí el viento es alternadamente fresco y tibio. Hay un olor a heno y a algo indefinible . Camino, camino. Decido dar vueltas por los árboles, girando como si quisiera marearme. Stop. No es esto lo que quiero,
lo que intento es sentir la textura de los troncos, el sonido de las ramas que crujen y sentir el rodeo de la muerte para comprenderte Émile . No gritar, no asustarme. Todo es propicio para desatar el nudo que me detiene.
Vox horrisona, decía Luis Hernández y dibujaba al mar y al sol, y moría, lentamente moría. Juan Ojeda se lastimaba y lastimaba, era el verdadero solitario, tenebroso y desamparado. Si aparecieran ahora no me sorprendería, ¿lo ves Silvia, desposeída y melancólica poeta? Silvia,
Silvia Plath, tu musical nombre se enreda con la renuncia y el desapego, tú asomas entre las sombras que el viento señala, y el sonido de un cello se oye ascendiendo por este campo magnético que nos captura. Y hay una crueldad en esta tribulación , no nos dejan solos, nos cercan, y estas flores que recojo, vuelan como vuelan otras caras alrededor nuestro, y no es justo, nada es justo, es alevosía, cenizas cayendo de pronto, un tornado pasa, el cello guarda silencio.
Starkel no gritaría. Tampoco he de gritar, no es necesario, no importa, no quiero. Mi madre tal vez cantaría. Dicen que cantaba aún devastada, dicen que lloraba por su hija, la abandonada.
Mi madre, tal vez me cantaría.
Aquí anochece y lo conocido está ausente. Campo magnético cerrado e impoluto. La metafísica no pinta aquí sus improperios; lascivos habladores desaparecidos ... y otra vez pienso en Starkel, en la escena en la que largamente la cámara enfoca aquellos rostros, aquel riel en constante movimiento, generando una soledad de oraciones impías, de la nada y el estertor que sólo sienten los expulsados de la gloria. Y más acá el viejo Cioran, insomne y solo, cazando sin intención, la verdadera amargura, la primigenia, gélida y oculta.
Sentarse en el mismo centro del encuadre y preparar la salida, recordar el aroma de la colonia de niño, aquella risa, aquel puente. Recordar para no quedarse atrapada en el campo magnético, oyendo a Silvia susurrando , pidiendo que me quede, y mirando volar por los aires al cello en inigualable circunvalación que consterna y desconcierta. Recordar los noticieros, la explanada donde bicicletas coloridas con chicos gritones corren, aquel tablero y aquellas voces que nos convocan, jalándonos, golpeándonos, irreconciliables, paradójicas, develando en su ritmo una nueva fundación, un nuevo extravío.
Recordar es volver, saltar del cuadro, simplemente volver.
* Luis Hernández y Juan Ojeda, poeta peruanos y Silvia Plath, poeta estadounidense. Los tres fueron suicidas.

17 comentarios:

maría malló dijo...

Te has olvidado de Alejandra... Pizarnik, por supuesto.

Anónimo dijo...

ELLA
te
cantaría
de
todas
maneras...
::::
y
con eso llegaría al mar

Qbi dijo...

Y lo ke kuentas es un rekuerdo?
y lo de hernandez, no se si manera sea un suicidio...
Saludos VIR XD

Qbi dijo...

VIR me gusta mucho tu radio blog XD

Qbi dijo...

vir: te enlace a mi blog, siento no preguntar antes.

Rpta:...

Anónimo dijo...

Este fin de semana tomé un libro, y me perdí en el corazón de las tinieblas... en paisajes que no conozco pero siento recorrer, y oír el murmullo del agua correr, y de las ramas de los árboles ancestrales, que miran sin hablar las efímera existencia del hombres. Leer ha sido un complemento a esa experiencia... no conozco a los dos autores peruanos y sí a Silvia Plath. Sueno repetitiva pero nunca me cansaré de admirar y leer tu blog.
un abrazo! :)

Carlos de Vega dijo...

No he podido leer. He puesto a Silvio y... bueno, hacía años que no escuchaba "El mayor" y estoy un poco emocionado. Me quedo un rato más escuchándolo.

Anónimo dijo...

La melancolía y sus resultados. Mirar para atrás es importante, pero luego hay que regresar la cabeza a su sitio.

Rain (Virginia M.T.) dijo...

Para este post, ella no apareció,ni Virginia Woolf, ni María Emilia Cornejo u otras...
Asomaron los rostros de Luis Hernández, la figura de Juan Ojeda -de quien recordé una borrosa foto que un profesor me enseñó hace tiempo y Silvia Plath, difusa, nebulosa... Alejandra asoma por los resquicios de cualquier lugar, siempre...

Salutes María Mayo.

Esperanza: Eso es hermoso.

Kubi: iré haciendo otras edciones musicales. Si hay alguna canción que quisieras permanezca porque te gusta mucho, me dices.
A Luis hernández, Silvia P. y Juan O. los recuerdan en un libro cuyo prólogo lo escribe Luis La Hoz - también poeta- ' vendrá la muerte y tendrá tus ojos .33 poetas suicidas'

Kubi, una de los títulos que más me han llmado la tención es el de tu espacio: 'kaballito del diablo'.
Seguimos en contacto.

Paloma, agradezco tus comentarios y tu feeling. Te visito. un grato salute.

Hormigo: esa canción bella, sí . Salutes... iré a recoger más cibergrano...

Noemí: volver, lo has dicho. ¡Salutes!

Bardamu dijo...

Una motocicleta entre los árboles de un bosque inefable. O las calles de Buenos Aires reclamando el aliento de Hernandez Camarero.
Sobre la motocicleta él y Silvia vertiginosos, regalando cuadernos a los transeúntes.
¿Cómo ha de entenderse el fatal aliento en el mismo sitio donde se prepara el pavo de navidad?
Traigamos Lucho:
"A todos los prófugos del mundo, a quienes quisieron contemplar el mundo, a los prófugos y a los físicos puros, a las teorías restringidas y a la generalizada. A todas las cervezas junto al mar. A todos los que, en el fondo, tiemblan al ver un guardia. A los que aman a pesar de su dolor y el dolor que el tiempo hace florecer en el alma"
Muy buen post, gracias.
Saludos

David Saä V. Estornell dijo...

Tienes un blog muy hermoso, destila honestidad. Dificil de encontrar. un abrazo

Anónimo dijo...

"Morir como tú, Horacio, en tus cabales,
Y así como en tus cuentos, no está mal;
Un rayo a tiempo y se acabó la feria…
Allá dirán.
Más pudre el miedo, Horacio, que la muerte
Que a las espaldas va.
Bebiste bien, que luego sonreías…
Allá dirán"
*Alfonsina Storni
, escribió este poema en honor a su amigo el poeta uruguayo, Horacio Quiroga que se suicicó justo un año antes que Alfonsina..
Hace un tiempo tioque este tema en un post.., por si te interesa leerlo:
http://blogs.ya.com/elrincondegrial/200504.htm#28
Un beso :)

Anónimo dijo...

Tremendo post, Vir..
No conocía a ninguno de esos poetas, pero gracias a tu homenaje me haré con el libro que mencionas(aunque nunca me cayeron bien los suicidas)O_o
Besiños

Qbi dijo...

tanguito y luis hernandez murieron en santos lugares, akaso ese lugar tiene algo ke ver kon su nombre?

Rain (Virginia M.T.) dijo...

Y Juan Ojeda, el silencioso sonriendo tímido, agitándoles la mano con lapicero entre sus dedos y en su cartapacio, poemas terriblemente bellos... Juan Ojeda, hermeneútico y elevado...
'Gracias a ti Bardamus, por desembarcar en tu barco claro!

Saa Vicenzo: Si así reconoces al puerto, me pongo tan contenta como una niña y luego me sumo en el silencio... Espero sigas desembarcando aquí en tu luminoso navío.

Leeré, si, el post. Gracias mil Grial, por el dato. Un beso.

Sonela: Es que es inconmensurable,
la complejidad de algunos seres, que eso rebasa lo que podamos 'éticamente' meditar sobre
ellos...
Salutes neohada.

Kubi: ¿Te refieres al término 'suicida' o a' campo magnético'? Si es al 2do, lo que pasa es que me quedé tan concentrada de pronto en el cuadro
de Klimt que como escribo, todo apareció en escenas sucesivas...
Salutes Kubi.

Unknown dijo...

si... alejandra p. y muchas más que supieron saltar, como alfonsina storni, anne sexton, muchos y muchas, el mundo está lleno de decisiones, la gente solamente algunas veces es decidida.. me gustó el post, y el blog está bell´siimo, como para no irse...
muchos besos..

Rain (Virginia M.T.) dijo...

Ah, ojalá vuelvas a estos comments, María Mayo. Olvidé decirte que la imagen del cello, la hice recordando que te gusta.