Existiría la reencarnación, existiría la posibilidad de vivir cada vida como quisiera, si acaso pudiera elegir... La gran fantasía. Quimera delirante.
Pensaba en estas 7 vidas a raíz de los comentarios que recibí en el anterior post, que agradezco especialmente, porque son deliciosos como si al hablar de carnes y postres, los blogueadores se hubieran nutrido mentalmente y volando por la blogosfera, hubieran llegado al puerto a dejar sus pensamientos con aderezos imaginativos, verbigracia en su punto.
Primera vida:
En ésta, me gustaría ser dueña de un restaurante de comidas exóticas, entre las que las comida peruana tendría su sitial de honor, donde los potajes tradicionales brillarían con la naturalidad de sus colores y aromas. Si Lukas hubiera reencarnado también, seguro que escribiría otra vez, porque tiene alma de escritor y sería uno de los primeros invitados que pisaría el salón donde el banquete estaría en una inmensa mesa con mantel de lino bordado. Una mesa sin demasiados adornos, sobria, magnífica.
Inauguración del Restaurante con platos peruanos y fiesta. (Deberé contar en otro post cómo se preparan las sabrosuras que indico aquí. Por lo pronto, por favor asumir con entera confianza que son maravillosos, ya que esta verdad es refrendada a nivel mundial.
Me falta ponerle un nombre al Restaurante. Quizás ustedes aporten nombres a mi pedido, ¿eh?).
Todo dispuesto para ser inolvidable.
La Ocopa a la arequipeña, el arroz con pollo, el cebiche hecho con pescado fresco, una cojinova hermosa en trozos, las sopas vendrían humeantes a pedido expreso de los invitados. No sé qué pediría Hope, sólo sé que en algún lugar del iluminado salón -sería casi verano- estaría dibujando a Scavenger Bride que conversaría como ella sabe hacerlo, sobre los principios kosner con María Mayo y Madrugada.
Juanita estaría comiendo un Lomo saltado, mientras Bat cat la contemplaría embelesado, con un vaso de pisco sour en la mano. Jorge y Luc se acercarían a saludar, vestidos como seres de cuentos de hadas -y no se verían absurdos, sino
hermosos- y Bat cat impresionaría con su fina manera de bailar a Juanita que sin duda se enamoraría de él.
Roberto Zucco estaría brindando con Melytta y Carlos, el Hormigo en una conversación amenísima sobre el origen de los dulces limeños. Cosmodelia estaría observando los cuadros de un artista novel, y en la mano llevaría un helado de frutas tropicales. Sonarían valses peruanos en música instrumental y la dorada mañana sería magnífica en su doceava hora. Naxos llegaría con su casaca negra brillante y en el salón se sintiría un magnetismo, la energía de Naxos.
Llegarían Erick riendo con Ce pequeño y la soñadora Noemí, los tres elegantísimos llevando ramos de flores para la anfitriona. Almalé y Susana , habrían coincidido en la puerta del restaurante y se abrazarían emocionados.
Doke libertario llegaría con ese aire a príncipe de los libros, y sería el invitado que concitaría un gran interés, lo que sin duda le azoraría. La presencia cálida de Álvaro R., le llevaría al Doke, a una conversación profunda sobre Paul Celan. "Ojo al texto", diría Álvaro R, y ambos reirían.
Un fragante arroz con leche sería degustado placenteramente por la FenmeOllanta, que rodeada de otros ajedrecistas, destacados como ella, sería una de las invitadas más sonrientes de la fiesta.
Una divina Sopa a la minuta saborearía Álvaro Portales, llevando en su folder, sus inquietantes dibujos, aquellos dardos de la imaginación.
Carlox no estaría quieto, daría un rodeo al inmenso salón, con su singular curiosidad y en ese paseo, un apunte musical nacería en su mente.
Kubi , con su exploradora mirada recorrería el vasto salón, deteniéndose enamorado en cada rostro de muchacha, y en una mano tendría su celestial anticucho. Zezé llegaría elegantísimo trayendo un cd' de Emile Simon, y al contemplar la mesa escogería probablemente el plato más aromático y bello.
Digler estaría riéndose y haciendo reír a Sonela, y el flash de Antonino Paraggi, caería sobre ellos como el rayo verde de Rohmer.
Y cuando Ángeles atravesara el umbral de la puerta, el Niño de la peonza exclamaría: ¡ qué bella mujer!. En ese instante Mothman fotografiaría la escena, que Óscar, Gatito viejo y Nacho contemplarían fascinados. Solamente Alejandro con su discografía Indie en su maletín, se atrevería a interrumpir esa magia, pidiendo permiso para ir hacia el cabrito con frejoles que como plato exquisito, estaría a punto de desaparecer.
Los mozos atenderían con gentileza y precisión. No habría quejas. Habría júbilo. Happenings dispersos por los jardines, un suave aroma de gardenias y no tardarían en llegar los Danzantes de tijeras.
Llegarían los músicos. La orquesta compuesta por sabedores eximios de cada instrumento, de cada melodía. La fiesta comenzaría y allí estarían, bailando una canción sobre planetas desconocidos, Alma y su amor. Grial llegaría luego de haber adquirido nuevos libros, como letradicta que es y Ángel, el elegante Ángel, la sacaría a bailar. Aquella casa giratoria a lo lejos vibraría en ese día de fiesta. Y Vicente admiraría la escena, el baile, comiendo unos picarones de los que diría: "son un manjar". Mirando esa expresión sublime en el rostro de Vicente, Ludovico alcanzaria raudo una generosa porción y diría mirando a Vicente "vamos hombre, que no exagerabas en absoluto. Divinos son".
F. se acercaría experimentando ese sumo placer que da la visión de unas humitas calientes con su aceutuna y su queso cajamarquino dándole ese gusto increíble. Y Javier de LaNuez, trayendo personajes de cómics en la mente, brindaría con Álvaro Portales, Leuzor y Juan por el reencuentro en medio de música y potajes excelsos. El brindis, la sonora risa: la celebración.
Kika con su rostro flor resplandeciente bailaría con el agudo Breton y Slaves&bulldozer con la cara sonrosada por los piscos sour reiría mucho con Kat, Gian y ParísSinmí. A esas risas se unirían Gabby, la pertinaz Gabby, el afectuoso David Saa, y llegando el chico malo aún con gotas de lluvia en sus cabellos, le diría a Gabby que le gusta su blog. Y de pronto, lista para bailar la presencia de la suave Paloma con su Fallen Stars se sumaría a toda esa vitalidad. La sonrisa de Leo Frank quedaría en esa cámara que Antonino llevaría orgullosamente durante toda la fiesta.
Un rostro expresivo surcaría la fiesta : Patricia entre palincestos mentales llegaría con su sello de distinción. Y la fiesta estaría llegando a su máximo esplendor. Entre risas y música la incursión de Dulce María con su 'Mercedes luminosa' en su bolso sería calurosamente acogida. En ese momento yo pensaría en los amigos que viven en el fin del mundo, y sabrían que no tardarían en cruzar esa puerta tallada , ese umbral de la iluminación.
Niños comerían helados y postres a discreción: Alvar lanzaría su trompo, allá afuera en el enorme patio con toboganes, subes y bajas, y columpios. Los niños harían su propia catarsis, su propia ensoñación.
Y en esta celebración, yo me pondría a bailar entre los invitados, girando por todo el salón. A cada giro, un pensamiento, una proyección.
Diseñando un proyecto nuevo, el restaurante sería autogestionario, un éxito total. La exquisitez no sería exclusivista. Se harían escuelas base de gastronomía como parte de la poética que la existencia necesita. Lukas aportaría algo nuevo, lo sé. Las mujeres amorosas de fogones e historias serían convocadas, porque ellas son la sal de la tierra y sus voces son como luz en medio de las tinieblas. Todo eso pensaría mientras estuviera bailando.
Sería una fiesta como pocas, la fiesta de sabores y vigorosas conversaciones. El sueño, breve paraíso, circunstancia feliz.
Nota.- De las otras vidas escribiré luego: ha de notarse que me emocioné y zas, la primera vida se llevó mis palabras.
Foto: 'Fiesta interna', acrílico de Yunis Rubis.
Pensaba en estas 7 vidas a raíz de los comentarios que recibí en el anterior post, que agradezco especialmente, porque son deliciosos como si al hablar de carnes y postres, los blogueadores se hubieran nutrido mentalmente y volando por la blogosfera, hubieran llegado al puerto a dejar sus pensamientos con aderezos imaginativos, verbigracia en su punto.
Primera vida:
En ésta, me gustaría ser dueña de un restaurante de comidas exóticas, entre las que las comida peruana tendría su sitial de honor, donde los potajes tradicionales brillarían con la naturalidad de sus colores y aromas. Si Lukas hubiera reencarnado también, seguro que escribiría otra vez, porque tiene alma de escritor y sería uno de los primeros invitados que pisaría el salón donde el banquete estaría en una inmensa mesa con mantel de lino bordado. Una mesa sin demasiados adornos, sobria, magnífica.
Inauguración del Restaurante con platos peruanos y fiesta. (Deberé contar en otro post cómo se preparan las sabrosuras que indico aquí. Por lo pronto, por favor asumir con entera confianza que son maravillosos, ya que esta verdad es refrendada a nivel mundial.
Me falta ponerle un nombre al Restaurante. Quizás ustedes aporten nombres a mi pedido, ¿eh?).
Todo dispuesto para ser inolvidable.
La Ocopa a la arequipeña, el arroz con pollo, el cebiche hecho con pescado fresco, una cojinova hermosa en trozos, las sopas vendrían humeantes a pedido expreso de los invitados. No sé qué pediría Hope, sólo sé que en algún lugar del iluminado salón -sería casi verano- estaría dibujando a Scavenger Bride que conversaría como ella sabe hacerlo, sobre los principios kosner con María Mayo y Madrugada.
Juanita estaría comiendo un Lomo saltado, mientras Bat cat la contemplaría embelesado, con un vaso de pisco sour en la mano. Jorge y Luc se acercarían a saludar, vestidos como seres de cuentos de hadas -y no se verían absurdos, sino
hermosos- y Bat cat impresionaría con su fina manera de bailar a Juanita que sin duda se enamoraría de él.
Roberto Zucco estaría brindando con Melytta y Carlos, el Hormigo en una conversación amenísima sobre el origen de los dulces limeños. Cosmodelia estaría observando los cuadros de un artista novel, y en la mano llevaría un helado de frutas tropicales. Sonarían valses peruanos en música instrumental y la dorada mañana sería magnífica en su doceava hora. Naxos llegaría con su casaca negra brillante y en el salón se sintiría un magnetismo, la energía de Naxos.
Llegarían Erick riendo con Ce pequeño y la soñadora Noemí, los tres elegantísimos llevando ramos de flores para la anfitriona. Almalé y Susana , habrían coincidido en la puerta del restaurante y se abrazarían emocionados.
Doke libertario llegaría con ese aire a príncipe de los libros, y sería el invitado que concitaría un gran interés, lo que sin duda le azoraría. La presencia cálida de Álvaro R., le llevaría al Doke, a una conversación profunda sobre Paul Celan. "Ojo al texto", diría Álvaro R, y ambos reirían.
Un fragante arroz con leche sería degustado placenteramente por la FenmeOllanta, que rodeada de otros ajedrecistas, destacados como ella, sería una de las invitadas más sonrientes de la fiesta.
Una divina Sopa a la minuta saborearía Álvaro Portales, llevando en su folder, sus inquietantes dibujos, aquellos dardos de la imaginación.
Carlox no estaría quieto, daría un rodeo al inmenso salón, con su singular curiosidad y en ese paseo, un apunte musical nacería en su mente.
Kubi , con su exploradora mirada recorrería el vasto salón, deteniéndose enamorado en cada rostro de muchacha, y en una mano tendría su celestial anticucho. Zezé llegaría elegantísimo trayendo un cd' de Emile Simon, y al contemplar la mesa escogería probablemente el plato más aromático y bello.
Digler estaría riéndose y haciendo reír a Sonela, y el flash de Antonino Paraggi, caería sobre ellos como el rayo verde de Rohmer.
Y cuando Ángeles atravesara el umbral de la puerta, el Niño de la peonza exclamaría: ¡ qué bella mujer!. En ese instante Mothman fotografiaría la escena, que Óscar, Gatito viejo y Nacho contemplarían fascinados. Solamente Alejandro con su discografía Indie en su maletín, se atrevería a interrumpir esa magia, pidiendo permiso para ir hacia el cabrito con frejoles que como plato exquisito, estaría a punto de desaparecer.
Los mozos atenderían con gentileza y precisión. No habría quejas. Habría júbilo. Happenings dispersos por los jardines, un suave aroma de gardenias y no tardarían en llegar los Danzantes de tijeras.
Llegarían los músicos. La orquesta compuesta por sabedores eximios de cada instrumento, de cada melodía. La fiesta comenzaría y allí estarían, bailando una canción sobre planetas desconocidos, Alma y su amor. Grial llegaría luego de haber adquirido nuevos libros, como letradicta que es y Ángel, el elegante Ángel, la sacaría a bailar. Aquella casa giratoria a lo lejos vibraría en ese día de fiesta. Y Vicente admiraría la escena, el baile, comiendo unos picarones de los que diría: "son un manjar". Mirando esa expresión sublime en el rostro de Vicente, Ludovico alcanzaria raudo una generosa porción y diría mirando a Vicente "vamos hombre, que no exagerabas en absoluto. Divinos son".
F. se acercaría experimentando ese sumo placer que da la visión de unas humitas calientes con su aceutuna y su queso cajamarquino dándole ese gusto increíble. Y Javier de LaNuez, trayendo personajes de cómics en la mente, brindaría con Álvaro Portales, Leuzor y Juan por el reencuentro en medio de música y potajes excelsos. El brindis, la sonora risa: la celebración.
Kika con su rostro flor resplandeciente bailaría con el agudo Breton y Slaves&bulldozer con la cara sonrosada por los piscos sour reiría mucho con Kat, Gian y ParísSinmí. A esas risas se unirían Gabby, la pertinaz Gabby, el afectuoso David Saa, y llegando el chico malo aún con gotas de lluvia en sus cabellos, le diría a Gabby que le gusta su blog. Y de pronto, lista para bailar la presencia de la suave Paloma con su Fallen Stars se sumaría a toda esa vitalidad. La sonrisa de Leo Frank quedaría en esa cámara que Antonino llevaría orgullosamente durante toda la fiesta.
Un rostro expresivo surcaría la fiesta : Patricia entre palincestos mentales llegaría con su sello de distinción. Y la fiesta estaría llegando a su máximo esplendor. Entre risas y música la incursión de Dulce María con su 'Mercedes luminosa' en su bolso sería calurosamente acogida. En ese momento yo pensaría en los amigos que viven en el fin del mundo, y sabrían que no tardarían en cruzar esa puerta tallada , ese umbral de la iluminación.
Niños comerían helados y postres a discreción: Alvar lanzaría su trompo, allá afuera en el enorme patio con toboganes, subes y bajas, y columpios. Los niños harían su propia catarsis, su propia ensoñación.
Y en esta celebración, yo me pondría a bailar entre los invitados, girando por todo el salón. A cada giro, un pensamiento, una proyección.
Diseñando un proyecto nuevo, el restaurante sería autogestionario, un éxito total. La exquisitez no sería exclusivista. Se harían escuelas base de gastronomía como parte de la poética que la existencia necesita. Lukas aportaría algo nuevo, lo sé. Las mujeres amorosas de fogones e historias serían convocadas, porque ellas son la sal de la tierra y sus voces son como luz en medio de las tinieblas. Todo eso pensaría mientras estuviera bailando.
Sería una fiesta como pocas, la fiesta de sabores y vigorosas conversaciones. El sueño, breve paraíso, circunstancia feliz.
Nota.- De las otras vidas escribiré luego: ha de notarse que me emocioné y zas, la primera vida se llevó mis palabras.
Foto: 'Fiesta interna', acrílico de Yunis Rubis.
23 comentarios:
Oh, qué maravillosa visión, y qué detallista, Vir!!! Sigue, por favor, después que te recuperes de tantos giros...
Sin duda alguna, el detalle esta perfectamente cuidado lo que hace que sea un gran escrito...
Saludos
El Enigma
Nox atra cava circumvolat umbra
Vir.... me enseñas a escribir???? enserio, joper! qué envídea!!!!
Si tuviera 7 vidas, 7 vidas moriría;)
Cuídate, besos y un big abra:
Alma;) (f)
sin duda una vida no bastaria para comer a diario en ese restaurante. delicioso post
¡Qué bonito, Vir! Todos dando vueltas en tu imaginación y cada uno con su papel en la historia. Me encanta sacar a bailar a Grial entre letras! :) ...y que suene la música.
Un fuerte abrazo, de esos que dicen gracias mil
jajaja, realmente divertida esta... Cosmogastria?
saludos
¡Cómo me gusta esta vida! .Espero las otras seis que quedan porque serán deliciosas .De siete vidas sé mucho ,como gato que soy ...Lo he pasado muy bien .
Saludos
Esta es la parte literaria: si has trabajado en la cocina de un restaurante deben saber que es el unico circulo del infierno del que el Dante no recordo escribir nada.
Para un restaurante, la mejor opcion es la del Rick's Cafe Americain de Casablanca: un poco de relaciones publicas antipaticas y exito asegurado.
Para el nombre del Restaurante habria que consultar cualquier verso de Huidobro...
que dios se apiade de nosotros!! si la reencarnacion fuese algo real!! QUE DESENCANTO!!! imaginen tener que vivir siete vidas mas!! suficiente tengo con esta...
jajaj
por lo demas, excelente!
¿Un nombre al restaurante?
¿No te parece Puerto Asterix el más apropiado, con tantos invitados que siendo tan bien recibidos irían allí?
Saludos
ah!, me olvidaba del nombre para el restaurant; que tal...
"Le Cordon Blog"
o si quieres algo mas informal y filmografico:
"Steak Runner"
"El ultimo mango en paris"
"El Aji-nete sin cabeza"
"Paprix"
"A la sopa señalada"
"Bloggosis"
"Lo que el mozo se llevo"
"El señor de los membrillos"
"Harry Soupper"
"Ajo-calipsis now"
"Taxi Dinner"
...si se me ocurren mas taradeses... te aviso!
Espero estar algun día en esa futura reunion-reencarnación, con un pisco sour en la mano y en tan grata compañía.
Cariños, Vir.
Hermosísima ensoñación. Que mejor reencarnación que esos manjares de palabras y de los otros.
Has tejido un fino encuentro de ilusiones, como en una cinta de Moebius, adentro del sueño.
Ahí estamos, allí estaremos, por la magia derramada.
Saludos, con azoramientos y sonrisas.
Pues yo me alejaría un ratito de la fiesta hasta la vecina casa de Jay Gatsby, porque allí seguro que Redford y Francis están contemplando, desde el porche, tan fascinados como yo. Y me sentaría con ellos a tomar un Cardhu, a escuchar en la distancia la finura de los valses peruanos...
En verdad prodigiosa la forma de entrelazar tantos elementos increíbles, porque la amistad es como la buena comida y la buena música, hay que saber aderezarla y apreciarla, un suculento festín leerte reconociendo en tus palabras tantos rostros que ni siquiera conozco pero intuyo, entre ellos a mí mismo. Todavía disfruto esas imágenes. Gracias Vir.
¡qué acertada Vir! aún estando en un restaurant lo último en lo que a veces pienso es en comer pero la música nunca sale de mi cabeza.
lindo artículo.
saludos
Tal vez llevaría mi guitarra (mi vieja Matilda)para cantar un Fado poryugues, una vieja canci{on de Django Reindhart, y esperaría quien se apunts, con un cigarrillo en la mano y un vodka en la otra para un gran jam de be-bop
Espero reencannar en ese bar.
Un abrazo grande bella Vir
Wow, Vir,
sorry por casi llegar tarde
a la fiesta
y si todo elegante
llego yo
con un esmoquin
como un pinguino eh
negro y blanco
todo encantador io,
y me gustaria bailar
un vals contigo
wa, pd: llevo todos los cds de Emilie Simon ;)
cuidate
pd: agregame al messenger que tengas de hotmail.com, el de invazores.org igual resulta
te lo repito: impazziti@invazores.org
¡Qué fantástica reunión de locos! Se me ha hecho la boca agua. Por favor, Vir, no dejes de contarnos cómo se preparan todas esas recetas peruanas. Me encanta la comida típica de los países. A veces he cocinado comida mejicana, pero de Perú no conozco nada.
Hola Vir tengo un nombre precioso para tu restaurante:
"Sal de mar"
El nombre no es mío, tiene una larga historia que ahora no voy a contar, de eso ya hace muchos años...
Por cierto mirando por la red encontre esta bonita fábula sobre el origen de la sal del mar:
http://marenostrum.org/bibliotecadelmar/cuentos_ideas/sal/
Espero que te guste, jejeje...
Un abrazo
Gracias Almalé.Me alegra verte por el Puerto. Me gusta el nombre que propones. Más tarde (ahora me voy a pestañear) veré el link que me envías.
Otro abrazo para ti.
Ja,ja, me encanto, como usualmente lo haces con tus escritos, este en particular me hace evocar una tira de Mafalda comentandole a Felipe que sucederia si todo, todo, todo estubiera en un solo lugar, Felipe lo piensa y se desmaya, y Mafalda comenta algo asi como"ya vi que se dio cuenta"
Besos
Javier Prado
Javier, esa Mafalda es adotable. Aunque Quino decía que no era su preferida.
La has recoraddo y me voy con una sonrisa a tomar mi mate.
Publicar un comentario