24.1.06

Tu felicidad, mi felicidad

Felicidad. Si lees un libro y te encuentras en un punto en el que quisieras abrazar a los protagonistas, o a un personaje, sientes algo como la felicidad. Eso me sucedió con Arturo Belano y Césarea Tinajero en 'Los detectives salvajes'.

Leo lentamente.
No quise que terminara la lectura de esa novela cuya carátula no tiene nada que ver con los personajes en lo esencial. Ellos andaban desarrapados y en la portada lucen como dandys, con corbatas y sombreros.
Siempre el choque con la realidad, sea ésta de novela, virtual o 'real'. Y todo se mezcla y plaf, a veces se torna viciado, como una vida fútil o vana.O como escenas rasgadas, sí, como eso.
Cuando era niña fui feliz jugando con muñecos, muñecas y objetos inventados. Una metafísica de la cotidianidad infantil. Ah, sí no es una presunción: era una metafísica y yo no lo sabía.
La transfiguración en la infancia era esa capa dorado/plateada que cubría los juegos y las noches antes de entrar al sueño. Y mi padre era el rey generoso protegiendo su reino.
El peligro estaba ausente.

Pinguinos en las rocas. Nazca en verano y yo creía que eran niños convertidos en esos dulces animales con aletas y paso gracioso. Niños, niños como yo, pensaba, niños como tú, indefensos y suaves.

Y después, todos los besos. Los cuerpos y los besos. Los viajes, los conciertos, las caminatas y la timidez encubierta.
El país estaba en guerra y algo parecido a la felicidad, era caminar por las calles de Lima, para ir a la Filmoteca del Museo de Arte a ver las películas de Buñuel. La risa de los amigos, y de pronto
el sonido de las explosiones.
La guerra.
Una noche tocaron mi puerta y entraron a empujones.

Y me llevaron en una camioneta con lunas polarizadas en una noche templada, numerando mis cosas, quitándome mis cartas...
La felicidad cerraba los ojos.

'Siniestro total' cantaba en mi mente, para conjurar esa capucha sobre la cabeza. Un turbante ridículo. Y la chica de grueso cuerpo, lanzando puntapies a diestra y siniestra. Moretones, y la felicidad se dormía, se burlaba de ellos, de mí y de los manifiestos.
Después una ficha penal limpia. Yo era 'inocente'.
Y la vida continuaba su sucesión de escenas entreveradas.
***

Heroína fue tu madre. Es. Llevándote la comida en una viandera portátil, caliente y sabrosa, con olor a mamá y a horno rústico. Tu madre, con sus ojitos bondadosos y su paso firme, en esos días en que se comían hasta tu alma, en ese trabajo.
Así es, vivimos entre forajidos.
***

Y dime sabes qué se siente cuando tu bebé sale de la incubadora y está fuera de peligro:
Puedes imaginarlo. La constelación se acomoda en un sillón largo donde se duerme sobresaltada, porque el hijo reclama su alimento. Mi bebé y el mundo, o el mundo y mi bebé.

Tu felicidad ¿dónde estaba?

***

Flashback

Nunca te compares a nadie. Y no es que aquella canción 'Desiderata' sea perfecta. Tan ideal y trascendente.

Aprendí en medio de la guerra interior a serenar el trashumante ímpetu.

Nunca me gustaron las amenazas ni las difamaciones. Y si alguien intenta indisponerme contra alguien, solamente le creeré si acaso sé que esa persona es capaz de hacer algo por mí, ya que sin duda, yo haría algo por él, a menos que me pidan que haga cosas que detesto. Si acaso conozco mucho a esa persona, porque la caída humanidad pudre las palabras y lo que alguien te dice puede ser una mentira.
Podridas palabras, y polvo de tiempo.

***

La felicidad se oculta en los detalles o vive en ellos.
Bailar. Seamos felices cuando bailemos. Si te contara hijo mío cuanto he pensado en lo que sucede aquí, entre la mesa, la compu y la blogósfera.
Afectos de carne y hueso y la huidiza felicidad.
Enamorarse de una cara bella: esa no es mi felicidad.

Entre tu opacidad y la mía, median kilómetros y silencio.
Es el electroshock de los sentimientos. Si caen al alcantarillado, respira hondo.

***

¿Qué es ser exitoso en este mundo?
Los afectos vía blogs se esfuman como nubecitas en el cielo de los imposibles. Muchos links no hacen la felicidad. Obvio. tan obvio.
El autoengaño es lo peor que uno puede inflingirse.
De pronto nadie te recuerda y tú te estás pintando la escena a colores, cuando en realidad es en gris gris y más claroscuros.
El prestigio debe pesar mucho. Todo es cansancio. De pronto sabes que al final quedaste reducido, reducida, a una línea en una columna o que te borraron sin decirte por qué. Y que debieras ser cínico para ir hacia el equipo de sonido y poner una canción alegre. Y que todo eso no importa. Que al fin y al cabo, hace tiempo sabes que la felicidad está en otra parte, o es eso lo que creo ahora, mientras voy por un cigarrillo .

Tu felicidad, mi felicidad congeladas. Quiero derretir esos terrones actos o imágenes cristalizadas y cromáticas. U oscuras, oscuras.

Tu felicidad, mi felicidad.
Todo se desvanece.

***

Te recuerdo:
tú dirías que es una floritura hablar de terrones actos. Luego te reirías y cantarías algo alegre como tú. Y te burlarías de Luis Miguel, mientras la neblina nos robaría la próxima canción.
Después dirías que la floritura no es tal y me darías un abrazo.
Y estás en algún punto lejano del planeta, despegando avisos publcitarios, con tu casaca negra y tu discman.
&&&&&&&&&&

Arrancabas los avisos publicitarios de las paredes mientras caminábamos por el centro de Lima, despotricando contra Fujimori y el paquetazo que me envió al hospital.

Cuídate de las torpezas". Oye, tenías razón. Yo juré que eso no sería crónico en mí, y dale Vir&, si escribes algo y dices que no eres ninguna pobre diabla, ten cuidado.
Ahora sólo me entenderé yo, y unos pocos. Son sólo unas líneas. Que el fastidio no cunda.
Si acaso no te fijaste que no podías mencionar algún adjetivo, es porque no eres maravillosa.
Tendrías que estar fijándote en todo lo que dices, e inclusive si dices maravillosa, tendrías que darte cuenta si alguien se sentirá aludida o aludido. No vaya a ser que alguien tenga ese nick y asuma que le estás agrediendo o en fin, hay tantos nicks, tanta historia.

Mas yo no soy importante. Sólo soy importante para mi niño y no es un lamento, decirlo. Esa es la verdad. yo no soy importante para el mundo. Me importo yo misma y en esa verdad, todo se decanta.

Clac, el mundo no se va a acabar por eso.
Ah, los insultos como garfios, no me gustan. No insultaría a alguien que no conozco.
Ni interferiría entre enamorados, yo que soy una señora, una flaquita señora que no es importante.
Ah, si me siento, como si estuviera escribiendo un pastiche de cortometraje.

Toma primera:
Yo, toda delgadez casi translúcida, siendo llevada a la presencia de un cyberjurado. Jaloneada por dos robustos blogueadores.

Toma segunda:
el jurado me sentencia y transcribe como prueba de mi criminal desvarío, mis comentarios en letras amarillas sobre papel azul y luego lo incendia. Me quedo con una nube de tóxico en mi cara como en los dibujos animados de antes, en que a Bugss Bunny le caía una bomba y se quedaba negro negro de humareda. Y no se me permite decir ni fu. Mas yo digo fu fu y zas, me llevan a rastras.

Toma tercera:
Clac, con un cyberdisparo, me transformo en una ruma de huesos. Sin aspavientos me guardan en una cajita anaranjada y allì queda sellada Vir&, toda desparramada.
Qué triste.
***
Volviendo a los insultos, digo que sí, que me daría el gusto de insultar a los congresistas.
UN GUSTAZO. Y a los dictadores, también, con insultos más gruesos, de acuerdo a sus investiduras. Sólo por catarsis. Los insultos nada cambian.

Catarsis, con algo parecido a la felicidad, dentro. Como cuando escribo un poema después de algún suceso grato.

***

Tu felicidad es otra.
Yo a veces soy feliz.

Y ahora ven mi niño, vamos a escuchar 'Letters home' de Dead blonde Girlfriend y a bailar.

Te ríes tanto. Y el instante es solar.

Tú eres mi felicidad.

Y ¿dónde está tu felicidad? A ti que te gusta ver cascadas de agua cristalina, ¿dónde?.

'Letters home' está en la radio del puerto. Si quieres escucharla, ubícala, haz click y listo.

Nota.- Disculparme por favor, cambié en la noche, la edición de la radio del puerto. La primera canción o la que quieran , podrían escuchar y bailar.


18 comentarios:

Anónimo dijo...

la felicidad es tan breve que a veces mucha gente vive sin saber que la encontro muchas veces

Anónimo dijo...

yo no tengo felicidad...

Anónimo dijo...

Ja Ja Ja

XIGGIX dijo...

siempre en la vida podemos encontrar instantes de felicidad. maravilloso post, muy sentidos, como todos, y muy ocurrentes, aquel cyberjurado me parecio pleno

Anónimo dijo...

La felicidad...

Me suena, me suena...

Donde compre eso...?

Ratzinger.

Anónimo dijo...

Yo quiero estar en todos ustedes, menos en Vir...No se, no me cae esta señora.

La Felicidad

Anónimo dijo...

En la última temporada de campañas electorales, recibí una llamada telefónica, contesté y la voz dijo: Buen día, habla Silvia Hernández, candidata por el PRI a la diputación por el cuarto distrito. Yo suelo evitar relaciones con personas que buscan puestos de elección popular, pero así como a cepillarme los dientes, mi madre me enseñó a dar las buenas tardes cuando han pasado de las doce. Antes del tardes la grabación me interrumpió para seguir alegando y colgué, porque la voz de Silvia Hernández ni siquiera me agrada. Limosnear es un deporte extremo, al final lo que se busca es manipular la atención del otro, y eso no es censurable ni un delito, al menos no para mí, siempre y cuando el limosnero comprometa su propio cuerpo, la cara o la voz viva, de otro modo no hay inocencia, pura basura publicitaria.

Anónimo dijo...

Quiero comprarle a la vida cinco centavitos de felicidad

pablob dijo...

Qué bello tu río de palabras, querida Vir, y qué extraña experiencia es bañarse en él. Uno comienza a sumergirse en un pozo tranquilo, rebosante de felicidad, y juguetea mientras la corriente lo arrastra lentamente a la nostalgia y de pronto el dolor y la tristeza toman, cada una de una mano, a la felicidad y pretenden sacarla de esa corriente plácida, pero ella resiste, sigue a flote, se hunde otra vez, traga agua pero resiste y se libera... la salva un niño, se salva ella y en cierta forma, al final, también el lector se siente a salvo y sale de ese río, empapado, con esa extraña sensación de haber sido feliz, por un instante.
Salutes y abrazos.

Anónimo dijo...

Soy para todos, ese es mi sino tanto para los gordos, flacos, intrigantes, falaces, bellos, hipócritas, cobardes, valintes, etc.

No elegí ser así, todos tienen derecho a mí. Y si escogiera, podría quedarme también aquí, mas soy pasajera, no permanezco mucho tiempo en un solo lugar.

Rain (Virginia M.T.) dijo...

La maternidad tiene sus momentos gloriosos. Son como picos en la vida.

La felicidad, dicen que al tener mucho dienro, se siente algo muy parecido a ella, por todo lo que se puede adquirir. Imagino que sí. Imagino que no.


***

Milagrosa, todos se justifican. Los
que
comprometen
su cuerpo, su voz viva tampoco son puros, sí valerosos porque pueden morir antes, ya que todos estamos destinados a morir y eso es ineluctable. El ser humano se la pasa justificando sus actos. Yo diría que
las implicancias de mi maternidad y el no tener un trabajo fijo me limitan y podría lamentarme, mas tampoco es totalmente cierto que la maternidad me limite, porque es una experiencia, una fuerte experiecia que en sí misma no me coloca en ventaja ni en desventaja absolutas.

Rain (Virginia M.T.) dijo...

E intento dailogar aunque no hay un nick de respaldo, un blog, un cuerpo metafóroco al menos.
´mas, como está la voz, se puede dialogar.


***




Pablo, si fue un instante, al menos un instante grato
podría decirte que me gratifica, y es así, sólo que al mismo tiempo sé que al final todo es vaguedad...

Un gratísimo salute Pablo.

Anónimo dijo...

Deja por lo menos un segundo de sonar tan forzada. Un segundo en el que no parezca la doctora corazón sería tan gratificante. Al menos deja de usar términos tan rimbombantes, empalagosos. Eso nos dejaría leerte con mayor soltura y quizás hasta se pueda recuperar un poco el placer perdido.

Rain (Virginia M.T.) dijo...

Qué puedo hacer, es mi manera de expresarme. Quienes me conocen , cara, voz viva, me aprecian como soy y en la blogósfera, también hay gente que llega aquí y se siente a gusto. No armonizas conmigo, entonces busca otro lugar. Ti crítica se basa en el antagonsimo intolerante, mas la dejo, porque te escucho y no me agazapo el blog como si fuera una torre de marfil.

Busca otros lugares donde te
sientas a gusto. No forzaré mi naturalexza para agradarte .

:) Lo que sí hago es abrirme a otros espacios mentales, mas no sigo porque bostezarás si
te hablo de Kierkegaard , que se me ha venido a la cabeza.

Y ahora mismo me hubiera gustado hablar sobre el chico ostra, libro de Burton, mas me detengo.

En la azotea me
espera la mini instalación rompenube.
También me ha provocado conversar sobre eso, creo que ahora mismo haré un mini post, porque tengo que madrugar.

Ah, lo último, sobre lo de doctora corazón, fue gracisoo, me hiciste lanzar una carcajada.

Anónimo dijo...

Oye Vir, puede ser que los lectores políticos te detesten. Los que conforman el grueso de apristas, toledistas, de la gente pro-Lourdes Flores Mano y claro los que quieren palabritas light, todo masticadito para leer 'sin complicaciones'.

Pucha, que ya se me hizo tarde ...

Ronmel.

XIGGIX dijo...

q comico es el ser humano, q buscamos en el otro?

XIGGIX dijo...

este es como todo puerto, multicultural, universal, q da cobijo

Rain (Virginia M.T.) dijo...

Un enorme sonrisa para ti Iggix.