Notas de ángeles

Los cuatro arcángeles.
Acrílico/lienzo: Fernando Calderón.

"Felices los que lavan sus ropas, porque así tendrán acceso al árbol de la vida y se abrirá las puertas de la ciudad.

Fuera los perros, los hechiceros, los impuros, los asesinos, los idólatras y todos los que aman y practican la mentira".

Apocalipsis; 22:14-15.

Sentados en los bordes de las piletas comían helados aunque lloviznara. Nubarrones y un viento gélido, risas de chicos con cuadernos en los brazos, sonidos de zapatillas, gritos , bocinazos desde la avenida se oían y el chico con sacón de pana negra se miró su tatuaje. Mira, dijo, dolió un poco y me sentí feliz después de tanto tiempo vagando por el universo.Ella, con sus zapatillas rojas y su abrigo casi al ras del piso sacó un espejo en forma de estrella y se miró la cara. "Tengo una peca cerca de la oreja izquierda. Hey, te ensuciaste los jeans, ¡distraído!".
Todo cae, todo fluye. Qué importa. Vamos a clase. dijo él riéndose.Ella se levantó y le dio un ligero puntapie. Ni te has dado cuenta de lo que dije. Bien sabes que mis pecas son contaditas y eternas.
Vamos, ya te dije que esas cosillas no importan, acotó él.

Entraron al aula. Él se sentó al lado de una chica que rayaba su cuaderno. El murmullo se desató. El enrojeció y miró a la chica que a su vez lo miraba de reojo, con las uñas clavadas en las hojas, y un rictus de fastidio. No era fea, no era linda, era hosca, podía ser hermosa sin problemas, mas lo único que le importaba era rumiar su rabia. Sin embargo como cualquier chica, no era indiferente al 'muñeco', que era como le llamaban a su compañero de carpeta, 'muñeco", como a un ángel de rostro perfecto.

Se hace la difícil dijo 'la pecosa'.

- Él se molestó y la chica creyó que la miraba fastidiado. Se entristeció un segundo y luego se tornó la misma, la hosca, la más detestable chica de toda la Alianza Francesa. Una joya, decían sus compañeros. Y ella se reía, y los insultaba. Ahora volteó y como un rayo , zas , su mirada vidriosa se concentró en él.

- ¿Cuál es mi lema chico bonito como mujercita? cagarme en tu cara y en tus aires de divo.- Él sin inmutarse la miró a los ojos y sonrió.

Tercera dimensión: círculo lila y la nada. Algo de lo desconocido se filtró en el ambiente.

La chica quiso decir algo, y la llegada del profesor la detuvo. En realidad no podría decir ni un carajo. Se quedó muda, muda como una payasita en desgracia.

- Muñeco, apunté la cantidad de segundos que los rayos y centellas de la fémina quedaron congelados en el tiempo. ¿Me oyes?

- Graciosita, deja de llamarme así. Hoy la chica se va a matar. Voy tras ella. Su padrastro está borrachísimo y la espera. Ella lo va a acuchillar y luego se toma todas los sedantes y muere, si acaso no llego antes.

- Vuela muñeco. Perdón, tú no puedes volar, yo sí. Vámonos.

Anochecía. llegaron sin dificultad a la casa de la chica. Entraron sin problemas. Ella entró volando y abrió la puerta. El crápula reía como un idiota al que se le cae la baba al ver a un efebo ingresando a su pocilga.

-¿Ladroncito eh? ven no más para que veas lo que es meterse con Nacho,el rey de la cuadra. Sus ojos parecían los ojos de un cuervo. Y cayó desplomado. El corazón le dolía y en un segundo estalló.

- Querido, se supone que soy un ángel y que esto es algo TE-RRI-BLE". Dijo ella mientras sonaba a lo lejos 'Perfect day' en la voz de Lou Reed. Vaya con la canción, para sonar ahora...¿oyes?

- No toqué a este hombre. Respondió el 'muñeco' y acercándosele, le acarició la frente.

- ¿Y ahora qué? ¡mortal, muévete!. ¿Dónde está tu DNI*? ¿me escuchas? y ella se agitó y se elevó hasta una esquina del techo.

- Eh, calma, tú eres el ángel y yo el mortal, o el ex-angel. ¿O mi mortalidad influye sobre ti? rió el muchacho.

- ¡Que el influjo de los vengadores no obnubile tu visión ! exclamó ella, aleteando con furia, mientras un mechón negro le caía sobre los ojos.

- ¿Por qué duermes tan poco ? preguntó la chica tocándole la cara al muchacho. Y se sacudió los pliegues de su blusa color turquesa. La 'hosca' era una musa en jeans.

- Estaba viendo cómo apuntan los ángeles lo que sucede aquí y allá.

- ¡Eeeeeeh! me encantan esas historias. Cuéntamela enterita.

- Mientras que el barco navega calmo, ¿por qué no ? ¿Acaso no sabes que entre un millón de finales, uno puede ser casi feliz? contestó el.

La chica saltó y se puso a bailar frenéticamente mientras 'The Smiths' sonaba. Como una reina liberada frente a su ángel terrenal.

Una lágrima caía en el rostro del chico, allí en el borde de la baranda , mirando aquel cielo imperecedero, la costanera, el paso de las gaviotas, la furtiva soledad. Mientras tanto la musa dormía .

Al día siguiente él moriría y lo sabía

Cerca, entre las olas, ella, la eterna, aleteaba y apuntaba.

*DNI: Documento nacional de identidad.